- Fernando Vázquez Pena es uno de los entrenadores más conocidos de la competición española, con una amplia trayectoria a sus espaldas, como miembro de clubes, y muchos de ellos gallegos. Ha entrenado a C.D. Lugo, S.D. Compostela, R.C. Celta, Deportivo de La Coruña, Real Valladolid, Mallorca, Oviedo y Betis, entre otros.
Hijo de una familia numerosa, este profesor de inglés nació el 25 de octubre de 1953 en Castrofeito, A Coruña (España). Empezó a colaborar en las escuelas deportivas de fútbol, ya que nunca dedicaría su tiempo a jugar al fútbol como profesional.
Subió con el Lalín desde Regional hasta Segunda B. Aquella fue su primera gesta profesional en los banquillos, la primera de muchas, destacando entre ellas su paso por la S.D. Compostela, con la que alcanzó el subcampeonato de invierno de la Primera División en la campaña 1995\96.
Vázquez entrenando al Celta de Vigo. |
- Permaneció tres temporadas en el cuadro santiagués, antes de fichar por el Real Oviedo en 1998, donde entrenó sólo por un año para después pasar a fichar por el Real Mallorca, sustituyendo en la segunda jornada al entrenador argentino Mario Gómez.
Su carrera como entrenador ya contaba con un gran prestigio en la máxima categoría española. Sus grandes dotes tácticas se hacían tan famosas como sus carreritas por la banda cuando su equipo marcaba un gol. Fernando Vázquez era puro espectáculo en todos los sentidos.
En el año 2000 cogería las riendas de un Real Betis de Segunda División, con el que no llega a la treintena de partidos siendo sustituido por Luis Del Sol en el cargo, quien acabaría llevando a Primera al conjunto verdiblanco. Después acumuló descensos a Segunda División con equipos como Las Palmas, Rayo Vallecano y Real Valladolid, antes de llegar a Vigo para fichar por el Real Club Celta. El club celtiña venía de descender a la categoría de plata, tras una mala temporada 2003\04 en la que se tuvo que acabar la temporada con dos técnicos de la casa, Rafa Sáez y Moncho Carnero.
En el año 2000 cogería las riendas de un Real Betis de Segunda División, con el que no llega a la treintena de partidos siendo sustituido por Luis Del Sol en el cargo, quien acabaría llevando a Primera al conjunto verdiblanco. Después acumuló descensos a Segunda División con equipos como Las Palmas, Rayo Vallecano y Real Valladolid, antes de llegar a Vigo para fichar por el Real Club Celta. El club celtiña venía de descender a la categoría de plata, tras una mala temporada 2003\04 en la que se tuvo que acabar la temporada con dos técnicos de la casa, Rafa Sáez y Moncho Carnero.
Su llegada no pudo tener mayor éxit, pues Vázquez no logró un ascenso a Primera con el Celta, sino dos. El primer ascenso sería en tierras andaluzas frente al Xerez, pero la LFP restó los tres puntos del cuadro gallego por alineación indebida del canterano Toni Moral, por lo que el equipo tuvo que afrontar otras dos finales para conseguir el ascenso.
Tras una inesperada derrota en casa ante el Eibar (1-2), el Celta obtendría su anhelado ascenso al conseguir ganar al Lleida en su propio feudo, por 0-2. Gracias al de Cstrofeito, el celtismo pudo celebrar la gesta.
Vázquez continuaría al frente del Celta, como no podía ser de otra manera. La temporada 2005\06 fue todo un acontecimiento para el celtismo, pues aparte de verse un gran fútbol, los discípulos de Fernando Vázquez clasificarían al equipo para volver a jugar la cotizada Copa de la UEFA.
Se complicarían las cosas de cara al ejercicio siguiente, con el equipo inmerso en la zona baja y sin poder evitar el descenso. Hristo Stoichkov sería su sustituto, pero el búlgaro tampoco podría evitar la debacle final.
El técnico Fernando Vázquez celebraba sus goles con graciosas carreras por la banda. |
- Tras su paso por el Celta, Vázquez se dedicó a entrenar a la selección gallega, llegando a formar tándem con Arsenio Iglesias. Ya el 11 de febrero de 2013, Vázquez pasaría a ser uno de los muchos técnicos que han ocupado tanto el banquillo del Celta como el del Deportivo.
La tarea de Vázquez consistiría en salvar al cuadro blanquiazul, que se hallaba ocupando el último puesto en la tabla. No conseguiría el objetivo, pero solamente necesitaría un año para devolver al "Dépor" al máximo nivel.
Luego entrenaría al Real Mallorca, con el que sufriría el descenso a la Segunda División B, lo mismo que le ocurriría en su regreso a La Coruña, con un Deportivo ya mermado por las deudas y una mala crisis deportiva.
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