Desde el banquillo: Marcos Alonso.

 

- Este mes recibimos la triste noticia del fallecimiento de Marcos Alonso, un hombre que fue un grandísimo futbolista y que realizó una gran labor como entrenador, la que concluyó en 2007, con el Granada 74.

En la mañana del 9 de febrero del 2023, este hombre del deporte español se rindió ante una larga enfermedad que se lo llevó por delante a los 63 años de edad. El fútbol le echará mucho de menos.

En Primera trabajó para equipos como el Rayo Vallecano, Sevilla, Racing de Santander y Real Zaragoza. También se hizo cargo de otros equipos de nivel menor, sin haber experimentado en el fútbol extranjero, aunque con una reconocida reputación que se labró en los banquillos por los que pasó.

Marcos Alonso entrenando en el Valladolid.

- Esa pasión por el fútbol es hereditaria, ya que Marcos Alonso Peña era el hijo de una leyenda madridista como "Marquitos" y hermano de César, quien no llegó tan lejos. A día de hoy, su hijo es jugador del F.C. Barcelona y ha pasado por otras reputadas entidades, aunque su posición en el campo es más retrasada.

Marcos padre jugaba como atacante, siendo un hombre del gol que un día nació en Santander (España), un primero de octubre de 1959. Con el Racing se daría a conocer en la máxima categoría.

Su calidad se paseó por importantes clubes como el Atlético de Madrid y F.C. Barcelona. En su etapa blaugrana es cuando celebró todos sus títulos, retornando a Manzanares para luego despedir su carrera con Logroñés y Racing.

A mediados de los noventa, Alonso reapareció como entrenador del Rayo Vallecano, después de haber colaborado en el cuerpo técnico del Atlético de Madrid. En Vallecas emergería como uno de los hombres de la casa que tuvieron que cubrir el mal inicio liguero de Pedro Mari Zabalza.

El 22 de octubre de 1995, el santanderino tendría que afrontar un partido a vida o muerte contra el Albacete. En su propio feudo, el Rayo se impondría por 2-0, pero el joven técnico aguantaría poco más, siendo sustituido por Zambrano.

A Alonso le vendría bien aquella experiencia para darse a conocer como preparador y, al año siguiente, el equipo de su ciudad precisaría de sus servicios para poder seguir compitiendo en la división de oro. El resultado fue óptimo, con el equipo ocupando la zona media de la tabla clasificatoria.

Después de no aguantar el tipo en la campaña 97\98, Marcos Alonso fichará por un Sevilla que ansiaba regresar a Primera, y el cántabro confirmaría el ascenso cubriendo el fallido intento de Fernando Castro Santos.

Marcos Alonso ascendió al Sevilla a Primera División, pero no pudo conservar su puesto.

- Con el Sevilla iniciaría la temporada del cambio de milenio, aunque no llegaría a terminarla por los malos resultados. A continuación, viviría otra dramática situación con el Atlético, que había descendido al segundo nivel.

Poco se pudo hacer por el equipo "colchonero", así que Alonso cambiaría de aires para poder volver participar en la Primera División, y esta vez lo haría con el Real Zaragoza. Sin embargo, no pudo hacer nada por corregir el mal desempeño de Luis Costa y Txetxu Rojo, y el cuadro maño bajaría a Segunda en 2002.

Se podría decir que fracasó en todos aquellos equipos que dirigió por la élite. El resto de su carrera técnica transcurriría por equipos competidores en la división de plata, pasando por los banquillos de Real Valladolid, Málaga y Granada 74. En el año 2007, el santanderino dejó de ejercer como entrenador.