Desde el banquillo: Francesco Guidolin.

- Lleva ya unos años en paro, desde que su decepcionante breve paso por la Premier con el Swansea City. Seguro que hay muchos clubes dispuestos a contratar sus servicios, ya que Francesco Guidolin es un hombre con mucho conocimiento en este deporte, y ha pasado por muchos clubes a lo largo de su carrera.

El Swansea son ha sido su única aventura por el extranjero, ya que también lo intentó en la Ligue-1 con el AS Mónaco. El resto lo ha dejado todo en su país natal, habiendo dirigido a diversos equipos de la Serie A italiana.

No hay grandes títulos que destacar, pero este entrenador ha trabajado para muchísimas entidades hasta la fecha: Bologna, Palermo, Udinese, Ravenna, Vicenza, Atalanta, Empoli, Treviso, Parma, Genoa... La lista parece interminable. 

Guidolin empezó con el Giorgione.

- Antaño fue un centrocampista que jugó en algunos reconocidos equipos, aunque tampoco podemos decir que haya tenido una carrera muy exitosa. A la selección italiana solamente la representó en la categoría Sub-21.

Francesco Guidolin nació el 3 de octubre de 1955 en Castelfranco Veneto (Italia). Saldría del Verona para darse a conocer como futbolista en otras entidades como la del Sambenedettese o Pistoiese, y a mayor nivel representó a Bologna y Venezia, para los que también serviría como técnico.

Ya en los campos de entrenamiento, Guidolin empezó con la sección juvenil del humilde Giorgione, pasando a entrenar también al primer equipo a finales de los ochenta, antes de fichar por el Treviso.

Entrenaría a otros modestos clubes como el Alma Juventus Fano, Ravenna y Empoli, hasta unirse al Atalanta en 1993. Con este club debutaría como manager de la Serie A, aunque poco duraría en el cargo, siendo sucedido en la décima jornada por Andrea Valdinoci.

Con el Atalanta descendido a la Serie B, Francesco hallaría una nueva oportunidad en el LR Vicenza, al que conseguiría ascender a la máxima categoría. Allí pasaría tres temporadas, dejando un buen fútbol y muestra de su sello de personalidad y carácter, rasgos muy típicos de este preparador italiano.

Por si fuera poco, con el Vicenza ganaría el único título importante de su carrera técnica, alzando la Coppa de Italia en 1997. Aguantaría un año más en el club veneciano, para luego unirse al Udinese de cara al curso 98\99.

Guidolin tendría otra larga etapa con el Bologna, al que dirigió por la primera división italiana, compitiendo por la Copa de la UEFA hasta que se quiso tomar un año sabático, para luego unirse al Palermo.

Guidolin ha entrenado a varios clubes, como el Parma, Vicenza, Palermo o Udinese.

- Interrumpiría su estancia en la empresa siciliana para probar fortuna por vez primera en el extranjero. Guidolin se marcharía a Francia para fichar por el AS Mónaco, donde cubriría la marcha de Didier Deschamps durante el ejercicio 2005\06.

Volvería al Palermo para suplir a otros entrenadores, viviendo complicadas situaciones deportivas que forzarían su salida del club. Después, durante una temporada se haría cargo del Parma, y luego sería presentado como técnico del Udinese.

Saldría de Udine tras cuatro temporadas, habiéndolo clasificado para disputar la Champions League y dejando una profunda huella de cariño entre la afición. En 2016, se aventuraría en el fútbol inglés, teniendo una mala experiencia con el Cardiff City, donde no duró mucho. Guidolin no entrena desde 2017.