Desde el banquillo: Hristo Vidakovic.

- Su trayectoria le ha llevado a experimentar en ligas exóticas como la indonesia, la hondureña o la de las Maldivas, pero Hristo Vidakovic tiene una amplia experiencia en el fútbol español, que es donde terminó su etapa futbolística para empezar como entrenador, en el cuerpo técnico del Real Murcia.

Fue durante muchos años jugador del Real Betis, y eso le llevó a entrenar a su equipo filial en la Segunda División B, categoría en la que tiene alta experiencia de haber probado con otros clubes como el Cádiz o Écija Balompié.

No ha podido llegar más lejos en España, así que por ello empezó a probar por todo el mundo, llegando a dirigir al C.F. Motagua, el United City filipino o el Maziya. Desde hace años se encuentra en Malasia, donde entrena al Melaka United.

Vidakovic como asistente en el Murcia.

- Siempre me declaré un gran admirador del fútbol balcánico, y este defensa fue uno de los que me entusiasmaron en mi juventud, cuando competía en la Liga Española, como hicieron otros ex-yugoslavos de su época.

Hristo Vidakovic Savic (Pиcтo Bидaкoвић) nació el 5 de enero de 1969, en esa ciudad bosnia de Šekovići que pertenecía a la República Srpska, entonces de la antigua Yugoslavia. Vidakovic se considera serbobosnio.

Éste era un fuerte defensa central de gran técnica que comenzó su trayectoria en el Fudbalski Klub Drina Zvornik, en Bosnia & Herzegovina. Luego pasaría por el FK Sarajevo, siendo reclutado para jugar después en el prestigioso Estrella Roja. En Belgrado se mantuvo hasta que la situación bélica se hizo insostenible, momento en el que aprovechó para fichar por un equipo español.

Vidakovic aterrizaría en España para unirse al Real Betis, en el que pasaría gran parte de su carrera antes de recalar en el Osasuna. Con el Poli Ejido jugaría sus últimos partidos en Segunda División, retirándose ya en 2002. Fue internacional por la selección yugoslava en contadas ocasiones.

En 2006 empezaría a interesarse por el mundo de la enseñanza en el fútbol, retornando a Serbia por un breve espacio de tiempo para trabajar como asistenta en la selección nacional, como ayudante de Javier Clemente.

Después regresaría a España junto a Clemente para seguir siendo su sombra en el banquillo dirigiendo al Real Murcia por la Segunda División española. Vidakovic echaría una mano en la aportación de jugadores, trayéndose al delantero senegalés Boubacar Dialiba, que competía entonces en la liga bosnia.

La estancia del balcánico en el Murcia duraría lo mismo que la de el técnico vasco, quien de cara a la temporada 2009\10 ficharía por el Écija Balompié. Sin embargo, Clemente no llegaría a empezar la temporada con el equipo andaluz. 

Tras su experiencia por el fútbol español, Vidakovic probó fortuna en el fútbol asiático.

- Sería su primera apuesta en solitario, dirigiendo al cuadro sevillano por la categoría de bronce española. Hristo aguantaría en el Écija hasta el final de aquella temporada, dejando al equipo en la zona media de la tabla.

En España aún seguiría entrenando durante unos años más, haciéndose cargo del Cádiz y posteriormente del filial del Real Betis. Al último dirigiría en dos campañas incompletas, pues parece que sus resultados no eran los esperados por la directiva verdiblanca, para la que había servido como jugador.

Vidakovic dejaría atrás suelo español para probar suerte por Honduras con el Motagua, de donde se iría para iniciarse en el fútbol asiático, comenzando por el United City filipino. Después pasaría a entrenar por otros lares como en las Maldivas o Malasia. Hasta hace poco ha estado trabajando para el Melaka United.