Desde el banquillo: Ferdinand Daucik.

- Retrocedamos muchos años atrás para recordar a uno de los mejores entrenadores de los años cincuenta y sesenta, con una buena experiencia en la Liga Española, breves pasos por Portugal y Canadá, además de lo que realizó a nivel de seleccionador, tanto con la extinta Checoslovaquia como la de su Eslovaquia natal.

Ganó diversos títulos por España, convirtiéndose en un experto en la Copa del Generalísimo (actual Copa del Rey), la que alzó con los Atlético de Madrid, Athletic de Bilbao, Barcelona y Real Zaragoza. También supo lo que es ganar la liga.

Además de los mencionados, Daucik dirigió a otras instituciones como la del Oporto, Real Betis, Sevilla, Elche, Indauchu, Español o Real Murcia, pasando muchos años en los banquillos para completar una exitosa trayectoria.

Daucik llegó al Barça en 1950.

- Su nombre era Ferdinand Daucik (Daučík), aunque en España fue tan popular y admirado que se le llamó "Fernando". Le gustaba este país y acabó sus días en él, pues falleció en la ciudad de Alcalá de Henares (Madrid), el 14 de noviembre de 1986, con 76 años de edad.

Haciendo click sobre su nombre, podréis saber más sobre su carrera futbolística. Daucik nació el 30 de mayo de 1910 en Sahy (Eslovaquia). En aquella antigua Checoslovaquia, tuvo una carrera como jugador en la que representó a los Komárno, ČsŠK Bratislava y Slavia de Praga, así como fue representante de las selecciones checoslovaca y eslovaca.

En 1942 acabaría su carrera para seguir como entrenador. En el ŠK Bratislava da sus primeras lecciones tácticas, pasando a dirigir a las selecciones que había defendido como jugador. También entrenaría a la poderosa Hungría de los cincuenta, tras una breve estancia en el Sokol Prievidza. Con el combinado magiar de los Sándor Kocsis, Ferenc Puskás y Ladislao Kubala, que era su cuñado. Con ellos alcanzó una gran popularidad y, con el fichaje de Kubala por el Barcelona, Josep Samitier se llevaría también al entrenador Daucik.

Tendría una buena plantilla a su disposición en Les Corts, con Antoni Ramallets de guardameta, Gustavo Biosca, Estanislao Basora y el húngaro Kubala. Con ellos se dispondría a ganar varios títulos en la competición española.

Empezaría con la conquista de la primera Copa española, a la que seguirían otras dos ediciones, dos campeonatos de liga, otras dos de la Copa Eva Duarte y la Copa Latina del 52. En sus cuatro años por la Ciudad Condal crearía escuela, abandonando la disciplina blaugrana en 1954.

Daucik pasaría a entrenar a otro de los grandes de la Liga Española, el Athletic Club. Al cuadro vizcaíno gestionaría durante otras tres campañas, en las que celebraría otras dos Copas del Rey y el título liguero de 1956 (doblete).

También se haría cargo de un Atlético de Madrid al que también aportaría lo suyo, aunque ya en menor medida. El técnico eslovaco sumaría otra Copa del Generalísimo a su currículo, en un mal año en el que no acabaría la temporada con la escuadra rojiblanca, sucedido en el cargo por José Villalonga.

Continuaría con su particular peregrinaje por equipos del fútbol español. interrumpiendo su estancia para entrenar a otros clubes del extranjero como el Oporto y los Toronto Falcons, en Portugal y Canadá respectivamente.

Al Real Betis dirigiría durante casi tres años por Primera División, donde pondría a jugar a su hijo Yanko Daucik antes de abandonar Sevilla. Luego pasaría por otras entidades como la del Murcia y Sevilla.

Fernando Daucik entrenó a diversos clubes españoles y celebró varios títulos.

- Tras su retorno a Bilbao para trabajar en el Indauchu, Fernando Daucik pasaría a representar al Real Zaragoza a mediados de los sesenta. Fue entonces cuando sumó su última Copa del Rey, dirigiendo con éxito a la afamada delantera de "Los Cinco Magníficos", que contaba con los Lapetra, Canario, Santos, Villa y Marcelino.

Concluida su estancia de dos años por Zaragoza, Daucik seguiría haciéndose cargo de clubes españoles, aunque ya a diferente nivel. Después de entrenar a Elche y nuevamente al Betis, pasó por San Andrés y fichó por el Espanyol.

Al equipo "perico" condujo por su última experiencia en la máxima categoría. Sin más éxitos que celebrar, el eslovaco acabaría su trayectoria en los banquillos tras trabajar para el Cádiz, Levante, Sant Andreu y Moscardó.