Desde el banquillo: David O´Leary.

- Es una de las figuras más populares del deporte irlandés, un hombre que defendió una carrera de gran éxito como futbolista y que supo continuar vinculado al deporte desarrollando una trayectoria técnica que, hasta el momento, ha durado poco más de una década.

David Anthony O'Leary siempre será respetado por Elland Road, club al que sirvió como futbolista y entrenador. Sin grandes títulos de los que presumir, dejó su huella profesional y dedicación a un club en el que siempre se sintió identificado.

En la Premier también dirigió al Aston Villa, para años después reaparecer en el mundo del balompié como miembro del  Al-Ahli, equipo de la liga emiratí donde pasó una breve experiencia antes de apartarse del fútbol.

- Son muchos los que creen que O´Leary haría una buena labor entrenando a la selección de Éire, a esa a la que pudo representar como jugador en el Mundial de Italia 90. De momento no planea reaparecer en los blanquillos. 

David O´Leary nació el 2 de mayo de 1958 en el área londinense de Stoke Newington (Inglaterra). Su sangre es irlandesa, aunque lleva muchos años en el país vecino, donde también completó una reconocida carrera como jugador, como miembro de Arsenal y Leeds United. Para saber más sobre su historial como jugador, hagan click sobre su nombre.

A mediados de los noventa concluye con esa etapa de futbolista en la que supo ganarse un respeto. Yo recuerdo a O´Leary durante aquellos años, como me vienen a la cabeza ortos compatriotas suyos, grandes profesionales de su época como John Sheridan, Steve Staunton o Pat Bonner.

Nada más retirarse, David continuaría trabajando para el club de Yorkshire, donde ejercería como asistente del ilustre George Graham, designado primer entrenador del club a partir de septiembre de 1996. Durante dos temporadas, el irlandés iría observando las tareas de su primer maestro en el área técnica.

Una vez se fue Graham, la directiva del Leeds empezó a barajar algunos nombres para ocupar el puesto de manager en el club. Tras sonar varios candidatos, David O´Leary sería nombrado para cubrir la vacante.

El 3 de octubre de 1998, O´Leary se sentaría en el banquillo de Elland Road para dirigir su primer partido como técnico del Leeds. Por desgracia, no se cumpliría el mito de "entrenador nuevo y victoria segura", ya que el Leicester le estropearía el estreno al imponerse por un pírrico 0-1.

Pese a que costó un poco, los "Peacocks" acabarían sacando buenos resultados a lo largo de aquella campaña 98\99, en la que el equipo acabaría cuarto en la Premier, suficiente para poder competir por Europa.

Al año siguiente, O´Leary conduciría a su escuadra por la Copa de la UEFA, en la que alcanzaría las semifinales para caer frente al Galatasaray turco de Fatih Terim, el que por sorpresa iba a ser campeón de la competición.

O´Leary continuaría al frente del equipo durante otras dos campañas más, consiguiendo el reconocimiento de todos por su brillante labor de entrenador, y es que el Leeds mereció competir también en la Champions League. Una vez más, sus pupilos caerían en la semifinal, esta vez ante el Valencia.

Mientras David estuvo al mando del cuerpo técnico del club, éste siguió compitiendo por Europa, pero las deudas acabarían situando a la entidad de Yorkshire en la League One. Eso supondría la marcha del irlandés.

En los años de David O´Leary como miembro del Leeds, Elland Road se acostumbró a Europa. 

- Como era de esperar, O´Leary contaría con ofertas para continuar en la élite, pero no reaparecería en los estadios hasta la temporada 2003\04, cuando la directiva del Aston Villa le ofreció un buen contrato para seguir en la Premier League.

Durante tres campañas dirigiría al conjunto de Birmingham, pero allí no pasaría de competir por evitar el descenso, algo a lo que ya no estaba acostumbrado. Por ello, en julio de 2006 negoció la rescisión de su contrato.

El simpático David O´Leary, descubridor también de grandes promesas del fútbol británico, reapareció para entrenar a Al-Ahli en los Emiratos Árabes Unidos. Tras una breve experiencia allí, el irlandés no ha vuelto a trabajar de entrenador.