lunes, 27 de diciembre de 2021

Desde el banquillo: Carlos Bilardo.


- Gran figura del fútbol mundial, tanto como futbolista como en los banquillos. Hace ya mucho tiempo que se apartó del fútbol, ese deporte del que tanto entendía y que tantas tardes de gloria le ofreció. Los de mi quinta le conocimos como uno de los mejores entrenadores del mundo, afamado por haber ganado la Copa del Mundo en 1986.

Su mejor pupilo fue Diego Armando Maradona, por quien sentía devoción y al que dirigiría tanto en su etapa de seleccionador como a nivel de clubes. Con el "Pelusa" alzaría esa copa del mundo y competiría en la Liga Española.
En la llamada "Liga de las Estrellas" dirigió al Sevilla, pero también se hizo cargo de otros clubes como el Estudiantes, San Lorenzo de Almagro o Boca Juniors. Otras selecciones que llevó fueron las de Libia, Guatemala y Colombia.

Bilardo ganó la Copa del Mundo.
- Carlos Salvador Bilardo Digiano, conocido chistosamente como "Narigón", nació el 16 de marzo de 1938 en Buenos Aires (Argentina). Como jugador, fue un técnico mediocampista que representó a San Lorenzo, Deportivo Español y Estudiantes de La Plata, ese club al que amó siempre y donde fue leyenda en todas sus funciones.
Se retiró en 1970 para un año después figurar como entrenador del club platense. De forma sorprendente, Bilardo conseguiría meter a Estudiantes en la final de la Copa Libertadores de 1971, pero el Nacional de Montevideo le amargaría la celebración al imponerse por un resultado global de 2-0.
Ya se habían comprobado sus grandes maneras como técnico, por lo que al "Doctor" no le faltarían destinos en los que seguir dando lecciones de fútbol. En 1976 aceptaría en reto de concursar en la liga colombiana, donde trabajaría para el  Deportivo Cali durante un par de años.
Otro equipo que entrenaría tras un pasado como futbolista, fue el San Lorenzo de Almagro, antes de que contase con la primera oportunidad de dirigir a una selección nacional. En la de Colombia tuvo sus primeras experiencias internacionales, para después retornar a Estudiantes. En 1982 realizaría otra gran gesta, celebrando el campeonato de liga con los "Pincharratas".

Como seleccionador argentino viviría los mejores momentos de su carrera, reemplazando en el banquillo a un César Luis Menotti que había fracasado con la albiceleste en el Mundial de España 82. Bilardo sería su sucesor.

Entre 1983 y 1990, el "Narigón" sería el encargado de dirigir a la última gran Argentina de todos los tiempos, en la que se encontraría con talentosos futbolistas como Julio OlarticoecheaDaniel PassarellaJorge ValdanoOscar Ruggeri y su admirado y gran estrella Maradona.
El gran día llegaría el 29 de junio de 1986, cuando Argentina se proclamó campeona del mundo al vencer en la final a Alemania. Fue un día épico, para un campeonato sensacional realizado por los de Bilardo, recordado siempre por todos los aficionados del mundo.

Bilardo habría sido testigo directo de la llamada "Mano de Dios" y esas estelares actuaciones de un Maradona que se acabaría llevando a España, y con quien habría llorado la venganza alemana en el Mundial de Italia 90.

Hasta entonces ya se habría conocido al peor y mejor Bilardo, un hombre acusado de tratar de dormir a los componentes de la selección brasileña con botellas de agua que contenían sustancias que producían somnolencia. 
Otra de las inolvidables polémicas fue aquella en la que se vio envuelto en un partido contra el Deportivo de La Coruña, en un partido de liga en el que el propio Maradona le había propiciado una patada en el rostro un jugador del Dépor, accidentalmente, claro. Pero Carlos Bilardo, lejos de ser limpio en el juego, exclamaría: "Los nuestros son los colorados, a los otros ni agua. ¡Pisaaaaalo, pisaaalo".

Bilardo y Maradona unieron sus caminos de nuevo en España, en el Sevilla F.C.


 - Su paso por la Liga Española no será gratamente recordado. Además de demostrar aquel excesivo carácter competitivo, dejó al Sevilla en una mala situación que le llevaría a descender a la Segunda División, lo que supondría su final en el Sánchez Pizjuán.
Pero no hay duda de que Carlos Bilardo fue un gran entrenador, cuya carrera empezaría a decaer a partir de los años noventa. A mediados de los noventa se haría cargo de Boca Juniors, donde no estaría mucho tiempo.

Dirigiría a otras selecciones como la de Libia y Guatemala, hallando un buen destino final en Estudiantes, un club realmente importante en su carrera deportiva. En 2004 dejaría de entrenar y pasaría a ocupar otros cargos.

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